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Por una sociedad #SinOdio | 22 de julio: Día Europeo de las Víctimas de Delitos de Odio

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La libertad de expresión es un derecho fundamental, sin embargo, esta no puede amparar discursos racistas y xenófobos, ni la desinformación o los bulos que tienen por objeto dañar la convivencia y la cohesión social.

 

Hoy se conmemora el Día Europeo de las Víctimas de Crímenes de Odio que se estableció en 2014 en memoria de las 77 víctimas mortales de los ataques motivados por el odio racista, en Oslo y Utoya (Noruega), en julio de 2011, un acto que nos recuerda las consecuencias últimas del racismo y la xenofobia  que están lejos de desaparecer con casos como el de George Floyd aún muy recientes.

Según datos del Ministerio del Interior en España, han aumentado en un 26,8% los hechos registrados como constitutivos de delitos de odio desde 2016. Además, los delitos de odio por motivaciones racistas se han incrementado en un 21% durante el año 2019. El último informe sobre delitos de odio de este mismo ministerio, que se presenta hoy, destaca que los ámbitos de ideología, “racismo y xenofobia” y “orientación sexual e identidad de género” son los que muestran mayor incidencia en los delitos tipificados como discurso del odio o “hate speech”.

En situaciones de crisis como la actual se aceleran las dinámicas existentes antes de la pandemia. Partíamos de una tendencia preocupante sobre la escalada de discursos del odio, xenofobia y racismo en las redes sociales, tal y como demostró la investigación del proyecto Desactiva el racismo y la xenofobia, donde señalábamos el auge de perfiles y páginas en redes que difunden prejuicios, desinformación y bulos sobre la población migrante, situación que se está agravando en el contexto de la actual emergencia sanitaria.

La era digital nos ha traído grandes beneficios y nuevas formas de interactuar, así como la libertad de expresión es un derecho fundamental, sin embargo, esta no puede amparar discursos racistas y xenófobos, la desinformación o los bulos que tienen por objeto dañar la convivencia y la cohesión social de ciudades, barrios y personas, y los mismos cimientos de la democracia sustentada en la protección de los derechos humanos.

Desde Fundación Cepaim trabajamos por una sociedad inclusiva e intercultural en la que la convivencia y la tolerancia no dejen espacio a los discursos del odio. Lo hacemos con proyectos como Desactiva la xenofobia y el racismo , Desactivando la xenofobia y el racismo, Yo desactivo la xenofobia y el racismo con la financiación del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, del Fondo de Asilo, Migración e Integración de la Unión Europea y del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 vía aportaciones IRPF, cuya plataforma central, ww.desactiva.org , pretende recoger preguntas frecuentes que se basan en bulos y desinformación, perpetuando prejuicios que circulan en redes sociales sobre las personas migrantes y refugiadas. Buscamos fomentar la reflexión sobre nuestras actitudes, prácticas sociales, individuales y colectivas para provocar un cambio de comportamientos individuales y colectivos.

Debemos tener más presente que las opiniones vertidas en redes y medios de comunicación basadas en argumentos racistas tienen un efecto real en la vida de miles de personas que ven cómo sus derechos son coartados, algo que como sociedad democrática y cohesionada con fuertes valores de justicia social y solidaridad, no nos podemos permitir.

Ejemplo de estas vulneraciones, son la discriminación en el acceso a la vivienda, como muestra el proyecto Eres Parte,  tal y como ha puesto de relieve el informe del Relator de Naciones Unidas o el Defensor del Pueblo. Con el objetivo de defender y atender a las victimas trabajan las organizaciones que conformamos el Servicio de Asistencia y Orientación a Víctimas de Discriminación Racial o Étnica (SAOVDRE), que está a disposición de las personas migrantes y/o de diferentes orígenes étnicos.

En este contexto queremos resaltar las dificultades de las víctimas de delitos de odio para poder denunciar este tipo de delitos, cuando se trata de inmigrantes en situación administrativa irregular, como los que habitan en los asentamientos chabolistas de la indignidad.

Abogamos porque el sistema establezca medidas de garantía adecuada a las víctimas de estos delitos en el caso de los migrantes en situación irregular a fin de que estos puedan denunciar sin miedo a represalias, y en un entorno seguro y adecuado a sus necesidades específicas como víctimas. Recordamos que el 24 de junio fue presentada en la Unión Europea la Estrategia sobre derechos de las víctimas (2020-25), en la que se hace referencia expresa a que “los migrantes irregulares que se han convertido en víctimas de delitos también suelen encontrarse en una situación de vulnerabilidad y pueden tener dificultades para acceder a la justicia. Si denuncian un delito a la policía, es posible que se les ordene regresar a su país de origen. En virtud de la Directiva sobre los derechos de las víctimas, estos se aplicarán de manera no discriminatoria, independientemente de su situación de residencia. Esto se aplicará también a los menores no acompañados. En el marco de esta estrategia, la Comisión evaluará los instrumentos jurídicos y prácticos a nivel de la Unión Europea para mejorar la denuncia de los delitos y el acceso a los servicios de apoyo para las víctimas migrantes, independientemente de su situación de residencia”

Desde Cepaim urgimos al Estado español para que implemente esta estrategia de manera que se garantice el derecho a formular la denuncia con las salvaguardas procedimentales adecuadas que permitan no revictimizar a las personas que sufren discriminación, abusos o violencia por su origen étnico, con independencia de su situación administrativa.

Nuestro compromiso por seguir luchando por una sociedad libre de delitos de odio nos impulsa a llevar a cabo alianzas como la recientemente puesta en marcha “por una Ley de Igualdad de Trato”  de la que somos parte junto a otras 7 organizaciones que trabajamos en la lucha contra el racismo y la xenofobia, así como en el trabajo conjunto con la Oficina Nacional de Lucha contra los Delitos de Odio y la Secretaria de Estado de Seguridad. Este año, poniendo en común el trabajo que venimos realizando desde el proyecto Desactiva y participando en II Seminario de Delitos de Odio en el Ministerio del Interior.

El trabajo por una sociedad inclusiva es nuestra misión, y ello implica a cada área y departamento, a cada trabajador y trabajadora, a cada persona voluntaria. Todas y todos tenemos la convicción de que necesitamos una sociedad abierta, que quiere conocer y aprender de las personas migrantes y de la diversidad como un valor. Con este objetivo Cepaim lleva apostando durante más de 26 años en sus iniciativas por lo comunitario, cuyo eje central es la integración real de las personas migrantes y solicitantes de protección internacional dentro de sus comunidades de acogida, un trabajo que necesita de la implicación y participación directa de todas las partes en cada territorio.

En 2020 proyectos como Comunidad Intercultural, Nos-Otras o ‘Reflejándonos’ y las acciones que dentro de estos se desarrollan fomentan los puntos de encuentro, ya que en el conocimiento está la clave para conseguir erradicar el odio y el miedo al diferente que se propaga gracias al temor a lo desconocido.

Por eso, en este Día Europeo de las Víctimas de delitos de odio desde Fundación Cepaim decimos NO al racismo y a la xenofobia, NO a los estereotipos y NO al discurso de odio que criminaliza y discrimina al diferente.

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