Los participantes del programa de jóvenes de CONVIVE Fundación Cepaim en Zaragoza, en el marco del proyecto 17 +, financiado por el Instituto Aragonés de Servicios Sociales, han acudido por segundo año consecutivo en campos de trabajo del Instituto Aragonés de Juventud, IAJ. Allí han conocido nuevos lugares, han conectado con otros/as jóvenes participando en un proyecto cultural común.
Han convivido durante dos semanas, no solo compartiendo experiencias, sino asentando valores como la solidaridad, la tolerancia, la interculturalidad, y sobre todo el respeto por el medio ambiente.
Pero, ¿Qué es un campo de voluntariado? es una actividad en la que un grupo de jóvenes de diferentes procedencias se comprometen, de forma voluntaria y desinteresada, a desarrollar durante un tiempo determinado, un proyecto de trabajo y actividades complementarias de interés social y cultural.
Desde la comunidad autónoma de Aragón hay un gran abanico de posibilidades en las tres provincias; nuestros jóvenes acudieron a Puy de Cinca, gestionado por Asociación Laboratorio de Ruralización, al campo “Agroecología, Bioconstrucción y artes escénicas" y al “Parque arqueológico Burren” en Frescano, gestionado por Asociación Cultural Campo de Urnas del Río Huecha.
¿Por qué elegir una experiencia así? Un voluntariado cultiva mente y alma. Te libera de la rutina mientras conoces lugares y realidades desconocidas de la mano de otras personas; aprendes de la experiencia y de las personas con un beneficio bidireccional; transciendes del quehacer diario llegando a forjar matices de personalidad que podrás desarrollar en el futuro. Pero vamos a preguntar a nuestros jóvenes, que cuenten de primera mano su experiencia.
“Traigo muchos amigos de muchos lugares. Tengo un grupo de Whatsaap que estamos todos. Voy a ir a visitarlos cuando pueda y recordar siempre esta experiencia.”
